Alternativa Española se concentró ante la galería en la que se exponen las fotografías del "artista" Labruce que mezclan la simbología católica con escenas sexuales para ofrecer una visión blasfema que constituye una ofensa a las creencias de los católicos.
Numerosos medios de comunicación cubrieron la protesta. Al final de la misma intervino el Secretario General de AES, Rafael López-Diéguez quien afirmó que estaban "dolorosamente hartos, profundamente indignados, cansados de ver como sin reacción de quienes debieran convocar a los católicos a defender pacíficamente su fe, a dar testimonio público del hastío que nos causan los ataques, cada vez más viles y miserables de quienes, amparándose en una falsa libertad de expresión, hacen befa y mofa de lo que para nosotros es sagrado, salimos a la calle para protestar, para decir basta, y lo hacemos aquí delante del lugar donde se expone ese conjunto de imágenes aberrantes que sólo desde la estupidez progresista que nos asfixia se pueden denominar arte".
El Secretario General de AES se pregunto por la razón de estos ataques, "¿por qué esos valientes actores, travestis y cantantes se brindan gustosos al ataque y la ofensa a los católicos y no lo hacen con otras religiones?
La razón es sencilla porque el catolicismo constituye una de nuestras señas de identidad; porque el catolicismo es la última barrera, el último obstáculo ideológico que impide que el torrente de los bárbaros penetre; que el nuevo orden moral -el desorden moral- se imponga; que el programa de ingeniería social que se oculta bajo la atrayente idea del progresismo, defendido y expandido por la izquierda y tolerado, cuando no apoyado, por la derecha, consiga vencer las resistencias que aún mantenemos como colectividad e individualidad. Para que ese proyecto de ingeniería social, que busca la destrucción de la familia, conculcar el derecho a la vida, eliminar la Moral objetiva pero también imponer como valores sociales comunes el hedonismo y el materialismo, para que ese proyecto se imponga -repito- es necesario destruir al último enemigo, el catolicismo".
La concentración se disolvió sin incidentes pese a que algunas personas salieron de la galería exhibiendo fotos de desnudos.
El Secretario General de AES se pregunto por la razón de estos ataques, "¿por qué esos valientes actores, travestis y cantantes se brindan gustosos al ataque y la ofensa a los católicos y no lo hacen con otras religiones?
La razón es sencilla porque el catolicismo constituye una de nuestras señas de identidad; porque el catolicismo es la última barrera, el último obstáculo ideológico que impide que el torrente de los bárbaros penetre; que el nuevo orden moral -el desorden moral- se imponga; que el programa de ingeniería social que se oculta bajo la atrayente idea del progresismo, defendido y expandido por la izquierda y tolerado, cuando no apoyado, por la derecha, consiga vencer las resistencias que aún mantenemos como colectividad e individualidad. Para que ese proyecto de ingeniería social, que busca la destrucción de la familia, conculcar el derecho a la vida, eliminar la Moral objetiva pero también imponer como valores sociales comunes el hedonismo y el materialismo, para que ese proyecto se imponga -repito- es necesario destruir al último enemigo, el catolicismo".
La concentración se disolvió sin incidentes pese a que algunas personas salieron de la galería exhibiendo fotos de desnudos.
1 comentario:
Claro, vosotros teneis todo el derecho del mundo a decidir si una mujer puede abortar o no, a decir en que tenemos que creer y que tenemos que hacer, a llamar a todo el mundo perroflautas pero los demás no tienen derecho a nada, ande y que os den por el culo, esto es democracia, si no os gusta la democracia iros a Cuba o a Korea del Norte.
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